El Galaxy S10 es un gran smartphone... pero no es ninguna revolución
Samsung acaba de presentar sus nuevos smartphones de gama alta, los Galaxy S10, S10+ y S10e.Y sí, los nuevos S10 son unos dispositivos que tienen prácticamente todo lo que necesitamos pero... ¿nos tenemos que conformar sólo con eso? ¿De verdad Samsung no tiene nada diferente que ofrecernos?
Un buen dispositivo pero... un poco soso
Primero de todo, quiero dejar clara una cosa: posiblemente el S10 sea el mejor smartphone del mercado. Sus tres modelos llegan con los mejores procesadores del momento, el Exynos 9820 (versión europea) o el Snapdragon 855 (en su versión china y americana), así como una memoria RAM que cubre todo lo necesario, llegando hasta los 12 GB en el modelo más caro del S10+ y con una capacidad que va desde los 128 GB ¡hasta un 1TB!
Además, Samsung incluye la triple cámara trasera por primera vez en un modelo de gama alta, e incluso una cámara doble para selfies en el S10+. Si el S9 ofrecía una de las mejores cámaras del mercado, con estabilización óptica y apertura variable, se espera que su sucesor la supere con creces.
No solo eso: los coreanos siguen pensando que el notch es una moda pasajera, y no han incluido la molesta muesca en su nuevo buque insignia. Eso sí, cuenta con el famoso agujero en pantalla, una de las tendencias de este inicio de año. Por otra parte, tenemos una buena noticia para los amantes de la conexión mini-jack (me incluyo), ya que el S10 aún resiste e incluye esta entrada para auriculares.
No quiero expandirme mucho más en este aspecto, ya que puedes leer nuestras valoraciones en los respectivos análisis del S10 y S10+. Si bien su lista de especificaciones técnicas es excepcional, no sorprende; más bien parece una actualización del S9. Estamos hablando del buque insignia del fabricante nº1 del mundo, y es por eso que esperaba algo más de innovación, alguna característica que me sorprendiese. Todo lo contrario, la presentación me ha dejado bastante frío...
Las filtraciones, su gran enemigo
Cierto es que hoy en día es difícil sorprender al público, y es en gran parte por las filtraciones. Y sí, los medios digitales tenemos gran parte de culpa. Meses y meses de rumores, de posibles renders y de imágenes filtradas, que poco a poco van perfilando los futuros dispositivos hasta saberlo casi todo de ellos semanas antes de su presentación.
A pesar de que sigamos teniendo estos eventos marcados en rojo en el calendario, todo esto hace que el efecto sorpresa desaparezca, y que cuando llegue el momento de levantar el telón, la emoción haya disminuido... Cada día nos cuesta más que nos sorprendan, y eso es un problema general de nuestra sociedad.
Las innovaciones, en manos de otros fabricantes
Habrá quién diga que Samsung no necesita sorprender para que su buque insignia sea un éxito. Muchos usuarios seguirán comprando un Samsung de gama alta porque su nombre lo avala y porque sus especificaciones son sólidas. Además, el propio fabricante confirmó que su estrategia es incluir sus innovaciones en los terminales de gama media (triple cámara en el A7, agujero en pantalla en el A8s), para luego lanzarlas a sus buques insignia.
Si pienso un momento, los últimos fabricantes que me han sorprendido han sido OPPO, Vivo y compañía, con la introducción de las cámaras retráctiles o deslizantes. Marcas que apuestan por la innovación como herramienta de marketing, o por unos precios más que ajustados, que, en mi opinión, si que son totalmente revolucionarios, como es el caso del Pocophone F1.
El smartphone plegable le hace sombra
Algunos pensareis: "¿Falta de innovación? ¿Es que no has visto el smartphone plegable que acaban de presentar?" Y sí, tenéis razón. Me fascina el nuevo dispositivo que se puede doblar, pero no lo considero aún una opción real de compra. Su precio de venta es muy elevado y su fabricación limitada, por lo que aún no es un producto de masas. Lo veo más cómo una demostración de fuerza de los coreanos, que han querido presentar el primer smartphone plegable entre las grandes marcas (técnicamente, el Royole FlexPai fue realmente el primero de todos).
Quizás este sea uno de lo motivos por los que Samsung no haya puesto toda la carne en el asador para el S10, centrándose en su Galaxy F. En un mercado saturado, es necesario renovar completamente el producto para ofrecer algo realmente nuevo, y eso es lo que debe ocurrir con la introducción de los smartphones plegables. Además, el Samsung plegable ha jugado con la ventaja de no ser víctima de las filtraciones, que han sido escasas, todo lo contrario de lo que ha ocurrido con el S10.
Si echamos la vista atrás, el Galaxy S8, con un diseño en su momento novedoso, y un aprovechamiento de pantalla mucho más optimizado que su predecesor, fue el último modelo de la gama S que produjo un cambio destacable, pudiendo tener la etiqueta de revolucionario. El S9 seguía siendo un gran smartphone, pero parecía más bien una actualización de su precedesor. Algo parecido a lo que pasa con este S10.
Del precio, mejor no hablar
Las cifras hablan por sí solas. El mercado de los smartphones esta en recesión y los grandes fabricantes han hecho unas previsiones de ingresos menos elevadas para 2019. Los consumidores cada vez tardan más en renovar sus terminales, pero los fabricantes no pueden permitirse un descenso en las ganancias. ¿Y cuál es una de las posibles soluciones?
Obviamente subir el precio de los terminales, especialmente los de gama alta. En los últimos lanzamientos hemos podido ver cómo algunos dispositivos rozan los 1.000 €, y otros incluso los superan ampliamente, como es el caso del S10+. Partiendo de la base que pagar 1.500 € por un smartphone es una locura, al menos que sea por un dispositivo revolucionario, y que sea radicalmente diferente a todos los demás, ¿no?
¿Y vosotros que opináis? ¿Os ha decepcionado la presentación del nuevo buque insginia de Samsung? ¿Esperabais más o vuestra atención estaba puesta en el smartphone plegable?
Como lo que tengo de Samsung, poco fiable y de dudosa calidad. Esta marca es el ejemplo perfecto de la obsolescencia programada o incluso temprana.