Lo llaman innovación y NO lo es

Evolución

Es una pregunta amplia que puede abordarse de muchas maneras y, en cualquier caso, no sabremos la respuesta. Sin embargo, lo cierto es que no hay ninguna innovación importante en el mercado. Hubo un tiempo en el que el objetivo era sorprender a los usuarios con nuevas características, útiles, prácticas, nuevas cosas. Hoy en día, encontramos una serie de innovaciones más o menos útiles (generalmente menos que más), la mayoría de las veces recuperadas de los modelos de la competencia.

Tomemos como ejemplo los primeros smartphones con Android o iOS: ¿qué podemos hacer hoy con nuestros smartphones que no podíamos hacer en el pasado? Por supuesto, todo es más rápido gracias a los mejores componentes, y hemos visto una evolución en términos de facilidad de uso e incluso de seguridad. En términos de innovación real, o "game changer" como dicen nuestros colegas estadounidenses, no hay mucho que sea realmente nuevo. ¿El 5G? Está más dirigido al futuro de los dispositivos conectados que al futuro del smartphone. ¿Inteligencia Artificial? Mismo combate, excepto en las fotos donde es cierto que puede tener (a veces) un valor añadido.

Los sistemas de desbloqueo han evolucionado de un simple código a un lector de huellas dactilares y reconocimiento facial. Nos ahorramos dos segundos cuando desbloqueamos nuestro dispositivo, lo que es muy importante, pero es cierto que en muchos casos la seguridad aumenta -mi colega Steffen probablemente no estará de acuerdo con esto dada su experiencia- aunque esto es discutible. Aunque no podemos hablar de verdadera innovación, es cierto que la cámara también ha evolucionado bien y ahora permite (en los mejores modelos, por supuesto) obtener muy buenos resultados. Una verdadera innovación que vimos hace unos años es el sistema de pago en línea: una innovación... cuya aplicación está directamente relacionada con el comercio.

... Innovación...

En general, de esto se trata: del comercio. El objetivo es pecuniario, de una forma u otra. Ya sea una "novedad" tecnológica para motivar la compra o una novedad para hacerla más fácil / rápida de comprar, volvemos al mismo punto. El caso es que tener evoluciones en lugar de innovaciones se está convirtiendo en un problema: queremos ver revoluciones y no smartphones que tengan más RAM o procesadores tan potentes que no sepamos qué hacer con ellos.

Mientras realizaba una investigación en el sitio de AndroidPIT, descubrí un artículo publicado por un ex editor en 2011. Se trata de 5 innovaciones, consideradas en su momento como futuristas. Es importante señalar que hasta 2018 no hemos podido ver un modelo concreto de teléfono flexible, una innovación que nos ha sido prometida desde hace tantos años: gracias a Royole y Samsung. Se trata de una innovación interesante (en la medida en que sea práctica y funcional y no una semi-innovación que ni siquiera se pueda meter en el bolsillo), una pantalla de este tipo permitiría tener un dispositivo normal cuando esté plegada y, al mismo tiempo, utilizar una gran superficie cuando se desee utilizarlo.

Otra innovación atractiva que trae consigo nuevos rumores cada año: una batería que puede durar mucho tiempo. Siendo la autonomía uno de los principales problemas de los smartphones (o incluso el principal), algunos usuarios ingenuos como nosotros podrían pensar que su desarrollo debería ser una prioridad, pero mucha gente está dispuesta a poner 1000 euros por un smartphone con sólo una cámara mejor y 1GB de RAM más, así que ¿por qué complicar sus vidas?

... ¡Alienación!

Aquí es donde reside parte del problema. Mientras haya demanda para este tipo de oferta, habrá oferta. Es obvio que las verdaderas innovaciones son mucho trabajo, pero ver a tantos fabricantes introducirnos en evoluciones simples o innovaciones generalmente inútiles bajo el término "innovación" está empezando a dañar nuestros ojos. Cambiar materiales, añadir efectos de luz en la parte posterior de los dispositivos, poner más RAM o potencia, proponer diferentes formas de hacer las cosas que ya existen, son muchas maneras de cerrar bocas y esconderse detrás del "progreso tecnológico".

¿A quién hay que culpar? ¿Constructores, porque se aprovechan de una situación? ¿Usuarios, porque se meten en su juego y piden más? La pescadilla se muerde la cola, estamos en un callejón sin salida... ¿Pero a quién le importa? El lavado de cerebro a través de campañas publicitarias de todo tipo asegura que la situación no cambie, y la forma en que los fabricantes alientan a sus usuarios (que a menudo también se dejan alienar) asegura que los usuarios se identifiquen con una marca y no con un dispositivo o tecnología.

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Sin ir demasiado lejos en el tema (la ayuda de un sociólogo sería probablemente necesaria a este nivel), la gente ya no parece tener ninguna perspectiva y se precipita en las profundidades abismales de las trampas del marketing. Las empresas, por otro lado, se están frotando las manos ya que pueden maximizar sus beneficios sin tener que ser demasiado creativas. Las innovaciones son mínimas y los precios se disparan, pero los smartphones a precios altos se venden bien, ¿no es eso un problema? Ciertamente, parece que la tendencia general entre los usuarios es favorecer las marcas que rompen precios (Xiaomi, Honor, OPPO....) en lugar de las marcas tradicionales que se están sumergiendo en una estrategia de lujo de gama alta, un hecho confirmado por un estudio reciente (que indica un descenso general de las ventas de smartphones a lo largo del año).

Fabricantes, si queréis cambiar esta tendencia, tendréis que volver a poner la tecnología en el centro de los smartphones y dar a las palabras su verdadero significado: lo que vosotros llamáis innovación generalmente no es innovación.