Zeiss VR One Connect: así llega la streamVR a tu smartphone

Zeiss VR One Connect: así llegan los juegos SteamVR al smartphone

Zeiss VR One Connect consta de tres componentes. En primer lugar, tenemos las ya conocidas gafas de realidad virtual Zeiss VR One Plus. Se trata de unos cascos compatibles con cardboard, y es donde se coloca el smartphone. Este puede ser un iPhone, pero como es lógico, también puede ser un smartphone Android. El segundo pilar básico de este sistema son sus dos Motion Controllers (controladores de movimiento), con los que podéis controlar la realidad virtual. El tracking (seguimiento espacial) funciona gracias a los sensores de posición ubicados en estos controladores.

Pero es sobre todo el tercer componente de este sistema el que nos trae la «magia». Un cable USB conecta vuestro smartphone con el PC. Un software en el PC se engancha a SteamVR y envía la información de la imagen al smartphone. Por su parte, una aplicación se asegura de que las imágenes se muestren y de que las señales de control se manden correctamente al PC.

El cable USB tiene tres metros de largo y, en principio, se trata de un cable de extensión estándar. Un adaptador en el headset nos garantiza que no importa si el smartphone tiene microUSB, USB-C o conector Lightning.

Una vez tengáis todo conectado, podéis utilizar vuestro smartphone con las Zeiss VR One Plus como headset para aplicaciones de realidad basadas en PC. Puede tratarse de juegos de realidad virtual, pero también, por supuesto, de aplicaciones como Google Earth VR. El mayor inconveniente es que los controladores realizan un seguimiento de solo tres grados. Para aplicaciones Room Scale (donde os podéis mover libremente por todo el espacio), al nivel de Vive, serían necesarios seis grados. Desde el punto de vista técnico esta solución se basa en que el PC calcula las imágenes de realidad virtual y el software Zeiss toma el contenido de VR de la tarjeta gráfica y lo envía al smartphone.

Zeiss VR One Connect está concebido, por tanto, como una solución económica para aplicaciones estacionarias de realidad virtual, (la longitud del cable USB lo pone de manifiesto). Por desgracia no hemos podido probar Zeiss VR Connect todavía, ya que en la IFA no hay ningún puesto con una demo.

En cuanto a los requisitos de hardware, Zeiss es exigente por una parte y no tanto por otra. No se requieren unos grandes requisitos para el smartphone. Aunque los dispositivos más potentes con pantallas AMOLED nos aportarán seguramente una clara ventaja. Por su parte, vuestro PC sí debe tener la suficiente potencia, así es que debería contar con una tarjeta gráfica con buenas prestaciones para VR, al estilo de la Geforce GTX 1060.

Zeiss VR One Connect quiere sacar dos versiones al mercado. Una primera con un set compuesto por el cable USB y los controladores por 129 euros. Esta es interesante para los usuarios que ya tengan unas Zeiss VR One Plus. Quien todavía no las tenga, puede comprar un kit completo de realidad virtual por 199 euros. El lanzamiento al mercado está previsto para otoño.

Creo que es una idea muy ingeniosa. ¿Cuál es vuestra opinión sobre Zeiss VR One Connect?