Análisis de Sony Xperia Touch: una extravagancia nada barata

No podemos decir que el Sony Xperia Touch sea un ejemplar único, aunque sí es cierto que es un dispositivo bastante exclusivo. El fabricante cuenta en estos momentos con una cantidad muy limitada de unidades disponibles, ya que estos dispositivos se ensamblan más o menos a mano. Es algo que se nota (en el buen sentido) en estas cajitas de 69 × 134 × 143 milímetros y 930 gramos. Su cubierta metálica perforada da la sensación de ser de buena calidad y sus controles están bien ajustados y tienen un buen acabado. El Xperia Touch se alimenta y se carga por la parte inferior a través de su fuente de alimentación con conector USB tipo C que se incluye. El cable es demasiado corto, aunque Sony ya ha prometido que lo va a solucionar.

La cámara graba el techo

El Xperia Touch se enciende gracias a un pequeño botón en su parte superior. En esta parte también se controla el volumen con los correspondientes botones. Esta cajita cuenta con una tarjeta de memoria, sin embargo, el Xperia Touch no dispone de ranura para tarjetas SIM. A fin de cuentas el Xperia Touch no es más que un dispositivo con la tecnología que podemos encontrar en el Xperia X, con un Snapdragon 617 y 3 GB de RAM. Como sistema operativo emplea Android Nougat. Incluso cuenta con una cámara de 13 megapíxeles que se encuentra en la parte superior. De este modo, el dispositivo permite hacer vídeo-llamadas si se coloca en posición vertical sobre una pared. Si lo dejáis en posición horizontal, como alternativa se pueden tener unas preciosas (aunque poco útiles) vistas del techo de la habitación. El Xperia Touch cuenta con unos buenos altavoces. Gracias a la tecnología Bluetooth, podemos utilizar también unos externos. Con un precio de 1499 euros, el Xperia Touch es cualquier cosa menos barato. Por ese precio podemos comprar cuatro Xperia X o dos Xperia XZ Premium.

Cualquier superficie, que tenga espacio suficiente para su diagonal de 23 pulgadas, se puede utilizar como pantalla del Xperia Touch, (al menos en teoría). El proyector, que cuenta con una resolución de 1366 x 768 píxeles, consigue llegar a los 100 luxes. Esto no solo se queda corto en un ambiente con bastante luz, sino que tampoco es suficiente para conseguir producir una imagen de calidad en muchas superficies. El Xperia Touch obtiene los mejores resultados sobre un fondo blanco que no refleje mucho la luz. También funciona sobre una mesa negra. Con cualquier otra cosa resulta complicado. Y realmente es una lástima, porque esto hace que el Xperia Touch pierda la mayor parte de su flexibilidad. Sony promete un valor de 4000:1 en el contraste.

El Xperia Touch se puede utilizar sobre la mesa o colgado en la pared en posición vertical. El proyector ajusta el enfoque de forma automática, la corrección de la distorsión trapezoidal no es necesaria gracias a que utiliza un ángulo fijo. Entre otros posibles usos, Sony presenta el Xperia Touch como una ayudante en la cocina, para proyectar recetas sobre la encimera y poder usarlo incluso con las manos sucias. En este sentido, este proyector Android también es bastante práctico para trabajos domésticos y de bricolaje. Por ejemplo, puedo proyectar unas instrucciones para arreglar mi bicicleta y hacer scroll (deslizar la pantalla hacia arriba) sin tener que ponerle una protección al smartphone o a la tableta, ni preocuparme por que se manchen. Pero cuidado, porque aunque la proyección sobre la mesa es resistente a la suciedad y al agua, el propio Xperia Touch no lo es (no tiene certificación IP) y no le va a sentar nada bien que lo mojemos.

Los juegos o son divertidos (o no funciona)

Hay algunos juegos que son realmente divertidos en el Xperia Touch, especialmente los que están pensados para dos jugadores. Una partida de Air Hockey, por ejemplo, en una superficie grande es mucho más divertida que en la tableta o en el smartphone. Las 60 imágenes por segundo (fps) del proyector ayudan a disfrutar de una experiencia de juego muy fluida. Otros juegos, como los de carreras, que utilizan el sensor de inclinación no van a funcionar en el Xperia Touch.

En lo que respecta a la seguridad, este dispositivo no nos ofrece muchas garantías, puesto que no cuenta con un bloqueo de pantalla ni ninguna protección similar para evitar posibles accesos no deseados. O sea, el que esté delante de un Xperia Touch puede utilizarlo sin ninguna limitación.

Para manejarlo tan solo hay que utilizar los dedos. Debajo del proyector hay un sensor de infrarrojos capaz de detectar hasta diez dedos. El sensor trabaja directamente sobre la imagen proyectada y, por tanto, solo funciona correctamente cuando la caja está sobre una superficie plana (si no es así, lo tendrá complicado). Además, no se debe interponer ningún objeto delante de la proyección, de lo contrario, el Xperia Touch tampoco funcionará correctamente. Si ponemos una taza de café delante de la pantalla, ya no podremos manejar el Xperia Touch.

El Xperia Touch quiere que lo configuremos

El reconocimiento de los diez dedos funcionó bien (en condiciones ideales) en nuestras pruebas. Aunque es recomendable calibrar el Xperia Touch, puesto que así mejora bastante su precisión. Algo un poco raro que nos ocurrió es que la primera calibración no se llevó a cabo directamente, si no que tuvimos que hacerlo a través de una aplicación una vez ya estaba Android correctamente instalado y funcionando. El Sony Xperia Touch le pide al usuario que vaya tocando en 15 puntos, uno detrás de otro. Una vez hecho esto, la calibración está lista.

El rendimiento de la plataforma no da el más mínimo problema en el Xperia Touch, Android funciona rápido y fluido. El Xperia Touch cuenta en su interior con un ventilador (necesario para el proyector). En general está continuamente en funcionamiento, pero no produce un ruido que sea especialmente molesto.

Los amantes del cine pueden usar el Xperia Touch como proyector puro y duro. Si colocamos el proyector un poco elevado o delante de la pared lo suficientemente separado, podremos conseguir una pantalla con una diagonal de 80 pulgadas. Aunque entonces la función táctil dejará de funcionar. A través de la entrada micro-HDMI también es posible inyectar una señal de vídeo externa.

La duración de la batería es realmente decepcionante. En las pruebas, el Xperia Touch solo aguanta una hora sin su cable de alimentación (y ni siquiera con el brillo al máximo). Así es que no da tiempo ni de ver una película completa sin tener que conectarlo al enchufe más cercano. Teniendo en cuenta las aplicaciones para las que está concebido y su precio, es un aspecto bastante negativo.

Conclusión

El Sony Xperia Touch es un dispositivo Android que no encontramos en ninguna otra parte. Si encendemos el proyector en casa o fuera y empezamos a trabajar con él, está garantizado que atraeremos unas cuantas miradas de asombro y que más de uno se acercará a preguntar. De alguna manera esto es algo fantástico y nos da la sensación de tener un dispositivo bastante futurista, lo cual no deja de ser cierto. El rendimiento del Xperia X que se esconde en esta cajita es más que suficiente.

Todo bien... ¿no? Pues no. Si la superficie no es muy buena y las condiciones de iluminación no son las ideales, la imagen del proyector es demasiado oscura y no tiene un aspecto muy bueno. En la práctica, el reconocimiento de las pulsaciones sobre la pantalla táctil da algunos problemas y la batería solo dura una hora. En las pruebas el Xperia Touch da la sensación de no estar todavía realmente maduro. En conclusión, por 1499 euros este dispositivo no es especialmente recomendable, (a pesar de que causa una curiosa fascinación). De todas formas, no podemos negar que es un interesante vistazo al futuro.

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