Samsung: una empresa en plena transformación (parte 1)
Voy a empezar mi historia por el final: llegué con una imagen concreta y volví con impresiones totalmente nuevas. Hacía diez años que no visitaba Corea del Sur, Seúl y Samsung, así que mucho de lo que tenía en mi memoria ha cambiado. Y esto significa, nada más y nada menos, que he tenido que revisar y reordenar las perspectivas que tenía hasta este momento.
El que viaja, tiene mucho que contar. Es un antiguo refrán alemán. Y una verdad bastante obvia, considerando que escribo estas líneas a más de 8.000 kilómetros de casa. No solo Seúl, esta gigantesca metrópolis ubicada casi en la frontera con Corea del Norte, ha cambiado. La empresa que estoy visitando también se ha convertido en otra totalmente distinta.
Y me sorprende. Después de todo, durante la década pasada he mantenido un contacto bastante estrecho con Samsung. Conozco a las personas que trabajan en la empresa, sus productos y sus formas de pensar. O por lo menos eso creía. No todo lo que pensaba sobre Samsung ha cambiado, pero esta vez me llevo a casa muchas impresiones nuevas. Por eso, me he decidido a expresar mis pensamientos en varios artículos que publicaremos durante los próximos días. De lo contrario, la cantidad de material sería excesiva, tanto para mí como para vosotros.
Seúl, la cuna de la innovación
Seúl es una ciudad que siempre se ha anticipado a su época. Lo era ya hace diez años: viva, rápida, moderna y en permanente cambio. En Seúl viven aproximadamente 10 millones de personas, y el área metropolitana llega a más de 25 millones. Una cifra increíble, si consideramos que la población total de Corea del Sur es de 50 millones, con lo que más del 50 por ciento de los habitantes viven en la capital. Este reportaje en inglés muestra lo impresionante que es la dividida península de Corea y sobre todo Seúl, el corazón de la mitad meridional.
Esta ciudad atrapa a sus visitantes de inmediato. No solo por sus rascacielos, gigantescos, estilizados e iluminados, o por sus montañas que parecen abrazar a la metrópolis. También fascina con una cierta sensación de alta tecnología que siempre rodea al turista y le muestra, de forma permanente y dolorosa, lo atrasados que están Europa y los Estados Unidos: conexión a internet de alta velocidad en todos lados, monitores de gran tamaño e imágenes nítidas y brillantes que parecen omnipresentes, y calles tan limpias que podrían competir con las de países como Suiza.
La gente sonríe casi todo el tiempo. Pero también son llamativas las dificultades que parecen tener si se les habla en inglés. Eso sí, podéis estar seguros de que harán todo lo posible por ayudar, pero por momentos, uno se pregunta cómo hacen los coreanos para comunicarse con el resto del mundo. La comunicación es un tema al que volveremos más tarde, cuando os cuente un poco más sobre Samsung.
¿Innovación? ¡La palabra del siglo!
El orden de los factores no está muy claro. No sabemos si fue Seúl la que marcó a Samsung, o si fue Samsung la que cambió el panorama urbano con sus innovaciones. La segunda opción no es nada inverosímil. Alguna vez leí que Samsung, como grupo empresarial, representa aproximadamente un 20 por ciento del producto interior bruto surcoreano.
Sí, Samsung quiere y debe ser una empresa innovadora. Realmente asombra en lo que se ha convertido aquella sociedad de comercio fundada en el año 1938. El emplazamiento "Digital City", un pueblo al sur de Seúl compuesto exclusivamente por edificios de Samsung, nos muestra una pequeña parte de las innovaciones desarrolladas por Samsung Electronics. Los primeros pasos en el sector de la electrónica fueron televisores, cuyo aspecto ya no podemos ni imaginar. Otros productos incluían lavadoras, aspiradoras y frigoríficos.
Durante los últimos días, Samsung ha estado utilizando la palabra "innovación" de una forma algo exagerada y, en mi opinión, sin fundamento. No todas las novedades pueden ser descritas como innovaciones. En la mayoría de los casos, lo que Samsung ha presentado son evoluciones. Pero sobre esto escribiré con más detalle en el próximo artículo: la necesidad enfermiza de innovaciones de la que sufre toda la industria de la electrónica y los smartphones.
Por otro lado, la empresa ha creado muchos productos que quizás no entren en mi categoría de innovaciones, pero que en realidad lo son. Por ejemplo, las pantallas AMOLED. O las pantallas de bordes curvados. Es probable que dentro de poco llegue la primera pantalla pleglable. En Samsung también dicen que están trabajando para desarrollar muchos productos que cambiarán nuestras vidas, sensores para ropa y hasta lentes de contacto con pantalla integrada.
Queda mucho para contaros sobre Samsung, y sobre sus innovaciones. Podréis leer el resto en la próxima parte de este artículo, que publicaremos el domingo.
