¿Quién dijo que Android tenía que ser innovador?

La innovación ha muerto, larga vida a la innovación

Creo que la principal razón por la que se cree que Android no innova, o lo hace muy lentamente, tiene que ver con la manera en la que Google implementa nuevas funciones. Lo hace a través de un goteo continuo de betas que apuntan lentamente a un horizonte de producto completo. Apple, por su parte, tiende a lanzar nuevas funciones en una manera más digerible, de una manera que, al menos, parece completa.

Sin embargo, muchas de estas funciones, tanto de Apple como de Google, son cosas que la mayoría de clientes y aficionados de smartphones, dudarían de llamar "innovadoras". Nada de lo ocurrido en los últimos años entraría en la categoría de "nueva gran innovación" (cállate, 3D Touch). Pero, al mismo tiempo, esto tampoco es culpa de Google o Apple, sino más bien del patrón natural que sigue la industria. A los smartphones no les queda demasiado espacio para la innovación, y si verdaderamente tiene que haber una nueva gran innovación, probablemente no la veamos venir.

En este contexto, perseguir la innovación debería ser, probablemente, el principal foco, y eso es precisamente lo que mejor se le da a Google.

La carrera de la innovación

Google Now se lanzó por primera vez hace cuatro años, y Popular Science lo llamó la innovación del año hace casi tres años, y ahora se está transformando en Google Assistant, una inteligencia artificial de capaz de realizar diálogos a dos bandas.

Pese a que Google Now y Google Assistant puedan considerarse innovaciones, han estado en desarrollo durante un largo periodo de tiempo, y tampoco representan la enorme evolución que la gente suele asociar a la innovación. Son el ejemplo de innovación lenta, pero Google está a años luz por delante de Apple (y de cualquier otra compañía, de hecho) en materia de aprendizaje automático y aplicaciones prácticas.

Google Wallet vio la luz hace cinco años, dos antes que Apple Pay, y vio nacer a Android Pay en febrero de 2015, como un competidor más directo del servicio de Apple.

Tanto Google Wallet como Google Pay representan una forma de evolución, tomando un servicio que hemos tenido y del que hemos dependido durante mucho tiempo (las tarjetas bancarias) y traduciéndolo a algo menos lioso y más práctico.

Google, además, está haciendo enormes avances en otras áreas, como la realidad aumentada, a través de Tango.

 

Google es un rey intimidante

En este juego de la evolución, jugado a un ritmo bastante lento, Google es rey supremo. A pesar de su número excesivo de betas y reajustes, a las varias y geniales subdivisiones de Google se les están algunas de las funciones de smartphone más interesantes de los últimos tiempos, y están además comenzando a extender su utilidad hacia el internet de las cosas con proyectos como Google Home y Android Auto.

No confundas un ritmo lento con la ausencia de ambición. A todos nos encanta la narrativa del genio que cambia el mundo, pero esta rara vez se corresponde con la realidad, y está claro que no vale la pena esperar esta situación o lamentar su inexistencia. Si algo así va a ocurrir, lo más normal es que nadie sepa preverlo. Con lo que sí podemos contar, y por lo que Google merece cierto mérito, es el llevar a cabo proyectos que crecen en paralelo con nuestras vidas.

Incluso el soporte para realidad virtual en Android Nougat, a través de la plataforma Daydream, es un resultado de años de desarrollo y maduración natural de la tecnología. La realidad virtual, y realidad aumentada junto a ella, podrían fácilmente ser esa próxima gran innovación que creemos que necesitamos, pero no ocurrirá de repente: llegará porque Google haya construido su infraestructura y encontrado maneras para hacer que estos proyectos se unan de una manera coherente dentro de nuestras vidas.

¿Estás de acuerdo con que Google está haciendo más por la evolución de los smartphones que cualquier otra compañía?