Por qué es inútil resistirse a la smart home

AndroidPIT smart speakers wifi speakers 3425
© nextpit by Irina Efremova

Leer en otros idiomas:

Después de eventos como el CES y el MWC de este año 2019, nos queda una sensación cada vez más clara: la revolución del smart home, y con esto me refiero a una mayor integración de los asistentes digitales y a una creciente gama de productos de consumo conectados, no se detiene. La resistencia existe, pero es inútil.

Siempre hay una reacción a las nuevas tecnologías, así ha sido a lo largo de la historia. La innovación crea muchos cambios. Y a la gente, en general, los cambios no le gustan. Echemos un vistazo a algunos de los principales argumentos en contra de la domótica, antes de explicar el problema con esta postura.

Razones por las que existe la resistencia a la smart home

El argumento más fuerte para posponer la compra de productos smart home es también la razón más comprensible: el coste. Hacer que nuestros hogares sean 'más inteligentes' es una cuestión de comodidad. Al menos eso es lo que nos dicen los fabricantes. Usar la voz para controlar tus luces es más conveniente que usar un interruptor. Tener un timbre inteligente para poder ver quién está en la puerta a través de un enlace de vídeo en el móvil es más cómodo que levantarse para mirar a través de la mirilla. Y así sucesivamente...

Sin embargo, esta comodidad tiene un costo. Los precios de compra de la tecnología domótica siguen siendo bastante elevados. Por ejemplo, llenar la casa con un juego completo de bombillas Philips Hue y el concentrador necesario para hacerlas funcionar no es precisamente barato.

AndroidPIT philips hue smart home smart lights 9453
Las luces inteligentes son bonitas, pero no son exactamente baratas. / © NextPit

En última instancia, la cuestión del precio se reduce a un simple cálculo. ¿Se recupera el coste de la instalación de dispositivos smart home en términos de comodidad? El precio inicial podría considerarse una inversión, pero para muchos, actualmente es un costo hundido hasta que la funcionalidad y la eficiencia de estos dispositivos se desarrollen por completo.

El segundo argumento para evitar la domótica está relacionado con el primero. Si se "invierte" en un centro doméstico inteligente o en un ecosistema doméstico conectado, como SmartThings de Samsung, se pasa a depender del desarrollo futuro del sistema en el que se haya invertido. El smart home todavía está en su infancia, y los productos y servicios disponibles hoy en día son solo una fracción del potencial abanico de opciones.

Pensad en las cámaras de seguridad inteligentes, un área del mercado doméstico inteligente que está ganando especial fuerza. Muchos de estos dispositivos están basados en la tecnología de nube. Si, por alguna razón, el fabricante quiebra o deja de soportar dicho servicio, el usuario podría terminar perdiendo todo su material y quedarse con un producto superfluo (y probablemente muy costoso).

reolink go security camera 08
Las cámaras de seguridad inteligentes son cada vez más populares. / © NextPit

Y luego tenemos el que quizás sea el mayor problema de todos: la privacidad y la seguridad. Las preocupaciones sobre la cantidad de datos que proporcionamos a las grandes empresas de tecnología, lo que esas empresas hacen con esos datos y lo vulnerables que son esos datos a los hacks, las fugas y el acceso no deseado son cada vez mayores. Lo que es interesante acerca del mercado de la domótica es que está creciendo a la par que estas preocupaciones. El total mundial actual de dispositivos con asistentes de voz, es decir, aquellos que pueden "escuchar" en nuestros hogares, se estima en 2.500 millones. Los expertos sugieren que esa cifra aumentará a 8.000 millones en todo el mundo en sólo cinco años. La lógica sugiere que el auge de estas tecnologías inteligentes para el hogar está en curso de colisión con el aumento de las preocupaciones de la sociedad sobre la privacidad y la seguridad en la recolección de datos de las grandes tecnologías.

Por último, hay cierta resistencia a los productos para el hogar inteligentes por parte de quienes piensan que todo es una moda. Entiendo este argumento, y cada vez que veo una bandeja de Smart Egg o un cepillo de pelo inteligente me permito una sonrisa irónica y agrando mi lista de "smart home sin sentido".

Pero a pesar de  todos los argumentos expuestos, toda esta resistencia es inútil. Y os diré por qué.

Una lección de historia

La gente tiene el hábito de luchar contra el cambio y resistirse a las nuevas tecnologías, pero la historia nos muestra que las protestas tienden a caer en oídos sordos. Después de todo, la reacción hacia la refrigeración fue significativa a principios del siglo XX, y mirad cómo resultó. Y en el Medio Oriente Medieval, la gente luchaba contra el consumo de café, algo impensable en la sociedad actual, tan acostumbrada a la cafeína.

Calestous Juma, profesor de la Kennedy School of Government de la Universidad de Harvard, ha explorado esta idea en un libro titulado "La innovación y sus enemigos": el libro examina 600 años de innovación y cómo los seres humanos a menudo se oponen a la tecnología. Y ha de decirse que las historias de resistencia exitosa son pocas.

Incluso si nos fijamos en las tecnologías más recientes que fueron descartadas antes de convertirse en la corriente dominante, hay algunos ejemplos flagrantes. A principios de la década de 1980, los teléfonos móviles tenían el tamaño de un ladrillo, pesaban lo mismo y costaban miles de dólares. No pasó mucho tiempo antes de que se acabaran las bromas y llegáramos a la etapa en la que nos encontramos hoy, ¿verdad? Conocía a un hombre que, a principios de los años 2000, decía que la ambición de su vida era "no enviar nunca un mensaje de texto". Ahora hace historias de Instagram.

shutterstock 138596186
En su momento, la resistencia inicial a los SMS se desvanció rápidamente. / © Shutterstock.com

Ciertamente no hay ninguna prisa para comprar productos de smart home ahora mismo. Es sensato esperar hasta que la tecnología sea asequible, más práctica y esté más extendida, como es el caso de muchos que esperaron un tiempo para comprar su primer smartphone. Pero lo que estoy tratando de decir es que la domótica se va a convertir en la corriente dominante. La próxima generación no será tan resistente. Y la siguiente no conocerá una vida sin asistentes digitales, timbres inteligentes y un horno que sepa lo que se está cocinando dentro de él.

¿Qué tan lejos estáis en el camino hacia un hogar más inteligente? ¿Estáis de acuerdo en que la resistencia es inútil? Compartid vuestras opiniones en los comentarios debajo.

Artículo siguiente
2 Comentarios
Escribir un nuevo comentario:
Los cambios realizados se guardarán. No hay borradores guardados durante su edición
Escribir un nuevo comentario:
Los cambios realizados se guardarán. No hay borradores guardados durante su edición

  • 25
    Carlos U. 13 mar. 2019 Link al comentario

    Ponemos bombillas "de esas" y Google le vende a la compañía eléctrica de turno, cuando encendemos y apagamos las bombillas, y Google venderá los datos de cuanto usamos la lavadora para recibir propaganda de la tienda "X" cuando ellos piensen que se va a romper, y así con todo lo que conectemos… Yo me resistiré todo lo que pueda ya que prefiero mi privacidad a una falsa comodidad


  • Ramon A. 35
    Ramon A. 13 mar. 2019 Link al comentario

    Gran parte de la resistencia al Smart Home creo que proviene de la inseguridad que genera que cualquiera pueda hackearnos. Otro aspecto es que domotizar nuestra vivienda no es un proceso fácil ya que nadie ofrece un servicio global o de adecuación fácil de entender. Saludos.