Análisis del Google Pixel 3: la grandeza de un smartphone casi único

El Pixel 3 no es muy barato

Al igual que sus predecesores, el Pixel 3 sale al mercado en dos variantes con diferentes almacenamientos internos. Por un precio de 859 euros fue el precio de salida  del modelo de 64 GB, mientras que la versión de 128 GB costaba 959 euros. Los colores disponibles son tres, más exactamente Just Black (negro), Clearly White (blanco) y Not Pink (rosa).

Con este precio, el Google Pixel 3 juega en la misma categoría que otros dispositivos de gama alta actuales. El problema: dichos dispositivos ya llevan meses en el mercado, y ya han bajado de precio (algunos de ellos bastante). Google ha decidido ajustar el precio para seguir siendo competitivo, y a diciembre de 2018, podemos encontrar sus Pixel 3 con una rebaja de 100 euros en su tienda oficial.

Formato manejable y sin notch

A primera vista, el Pixel 3 parece un Pixel 2 XL encogido. Los bordes superior e inferior de la pantalla de 5,5 pulgadas se han reducido considerablemente, pero aún así tienen espacio para dos altavoces estéreo ubicados en la parte delantera. El diseño no es de lo más actual, pero se ve menos anticuado que el del Pixel 2.

En lugar de un cuerpo de metal con una lámina de vidrio empotrada, toda la parte posterior es de vidrio, parte en la que Google separa el sector superior del resto para volver a ofrecer un rasgo característico de los teléfonos Pixel. El lector de huellas dactilares se encuentra al medio, en la parte superior.

Los bordes metálicos exhiben un acabado tan bueno como el de la parte posterior, que en nuestro modelo de prueba rosado "Not Pink" gana un acento bastante llamativo gracias al color anaranjado del botón de encendido. El control del volumen esta directamente debajo, pero a diferencia del botón de encendido brilla tanto como el marco.

En general, el Pixel 3 tiene un acabado excelente, y gracias a su revestimiento mate es menos resbaloso que la mayor parte de los dispositivos de la competencia. Además, es una sorpresa muy grata, el poder tener un teléfono de alta gama actual que se puede operar sin problemas con una sola mano, incluso cuando el móvil lleva puesta una de las gruesas fundas de Google.

Sin notch también se puede

La pantalla es de 5,5 pulgadas y tiene un aspecto de 18:9 con resolución de 2.160 x 1.080 píxeles (FHD+). Pero a pesar de tener un panel OLED; la pantalla no ofrece colores tan vívidos como un Samsung, por nombrar un ejemplo. Los usuarios pueden optar por los modos "Natural", "Reforzado" y "Adaptable". La temperatura de color no se puede ajustar de forma manual.

Además de SRGB, la pantalla también admite el espectro cromático DCI-P3 utilizado en el cine. La fidelidad de color es muy buena, mientras que los contrastes y valores de negro están fuera del espectro mensurable, algo típico de los paneles OLED. Google ha afirmado que la pantalla tiene una proporción de contrastes de 100.000:1. Como era de esperar, el Pixel 3 admite la reproducción de contenidos HDR.

El brillo de la pantalla es lo suficientemente alto como para poder ver bien contenidos bajo luz directa del sol, y durante la noche el brillo se puede ajustar con precisión para que  la luz de la pantalla no sea excesiva para la vista. Sin embargo, el dispositivo no llega al brillo máximo de smartphones como el Galaxy Note9 o el iPhone XS.

Active Edge presente una vez más

Con el Pixel 3 vuelve la función Active Edge, que puede usarse para activar el Google Assistant o silenciar una llamada entrante haciendo presión en los bordes del móvil. La sensibilidad de la función puede ajustarse manualmente. De momento Active Edge no se puede combinar con ninguna otra aplicación.

Un software sin marcas distintivas

El Pixel 3 viene con la versión actual de Android 9.0 Pie, ofreciendo una interfaz Android pura. La navegación gestual está activada por defecto, y no se puede desactivar de forma manual para volver a los tres botones clásicos. A todo esto, la navegación gestual no funciona tan bien como en el iPhone XS, por ejemplo.

Con apps funcionando en pantalla completa, primero hay que deslizar los dedos hacia arriba para activar la barra de navegación y después ir a la pantalla de inicio mediante un segundo gesto. Sin embargo, el deslizamiento también se usa para activar muchas aplicaciones si se reconoce como entrada en la parte inferior de la pantalla, algo que a menudo lleva al dispositivo a realizar acciones incorrectas.

Los gestos usados en la barra para cambiar de una aplicación a otra tampoco funcionan del todo bien, especialmente cuando se tienen varias apps abiertas. En este caso, hay que mantener un dedo pulsado en el extremo derecho, para que el deslizamiento hacia la izquierda muestre las aplicaciones abiertas anteriormente. En el momento en que se quiere ir a una de las aplicaciones hay que soltar el dedo con precisión, o de lo contrario se aterriza en la app incorrecta.

Funciones conocidas que vuelven

También vuelven a estar implementadas funciones como Always Listening para Now Playing, el reconocimiento automático de música (finalmente con historial) y Google Lens. Ahora, el modo oscuridad se puede activar manualmente, pero solo para los ajustes rápidos y el launcher, no para la configuración ni otras aplicaciones de sistema. Por lo demás, solo se destacan los nuevos fondos Live, que ya me habían gustado en la edición anterior.

Alta calidad, pero poco espacio de almacenamiento

Sobre el rendimiento no hace falta decir mucho: en combinación con la interfaz de Android puro, el chip Snapdragon 845 de Qualcomm hace un muy buen trabajo.   No podía ser de otra manera. El único reparo es que se podría haber equipado el SoC con algo más que 4 GB de RAM. Ahora mismo es memoria de sobra, pero en el futuro 4 GB podrían llegar al límite con aplicaciones cada vez más exigentes.

• Liberar la memoria RAM o no liberar, ésa es la cuestión

Además, Google tiene que instalar un parche para mejorar la gestión de RAM lo antes posible. La gestión actual elimina los procesos más antiguos del almacenamiento demasiado rápido, lo que ocasiona problemas en la función multitareas. En este caso, el modelo anterior tiene un desempeño mejor, con la misma cantidad de RAM y un SoC menos potente.

Encontraréis información más detallada sobre el rendimiento del Pixel 3 XL en nuestro análisis específico, que incluye resultados de pruebas benchmark y con videojuegos, y también vale para el Pixel 3.

• El rendimiento del Pixel 3 XL es un gran problema que se resolverá pronto

El almacenamiento interno no nos depara ninguna sorpresa: hay versiones de 64 y 128 GB, pero no hay posibilidad de ampliar la memoria. Los usuarios que necesiten más espacio para sus datos deberán optar por otro smartphone o por una solución de nube. Una estrategia de Google para promover el uso de su servicio de nube, ya que los compradores del Pixel 3 obtienen espacio de almacenamiento gratuito e ilimitado para fotos y vídeos por más de tres años.

Por lo demás, el dispositivo alberga las características que pueden esperarse de un buque insignia: Bluetooth 5.0 + LE, NFC, LTE Cat XX y WLAN a/b/g/n/ac (2,4 y 5 GHz), GPS, Glonass, Beidou y Galileo. El puerto USB tipo C también admite USB 3.1, por lo que permite una transmisión de datos de alta velocidad. Una novedad es el chip de seguridad llamado Titan M, cuya tarea es encargarse de la seguridad de vuestros datos guardados en el smartphone.

Sonido estéreo sin minijack

Los bordes de la pantalla del Pixel 3 se ven algo anticuados, pero vienen con una ventaja: hay espacio para dos altavoces estéreo en la parte delantera. Los altavoces ofrecen un buen sonido, con brillo en las frecuencias agudas y medias, y cuando hemos subido el volumen al máximo no hemos podido notar ningún tipo de sobrecarga. El altavoz superior suena algo más bajo que el inferior.

Las frecuencias graves hacen que el todo smartphone vibre, pero con menos fuerza de lo que hemos podido comprobar en el Pixel 3 XL. En mi opinión, el hecho de que vibre menos es mucho mejor y menos molesto, si bien algunos de mis colegas han afirmado que el efecto les gustaba.

Al igual que su predecesor, el Pixel 3 no tiene entrada minijack clásica para los altavoces. Así que los usuarios que tengan cascos con minijack necesitarán un adaptador USB tipo C. Como alternativa, Google acompaña el smartpone con auriculares USB del mismo tipo que los del Pixel Buds. Pero dichos auriculares no ofrecen un buen sonido y tampoco son cómodos cuando se los lleva puestos en las orejas. En este caso, prefiero unos buenos auriculares Bluetooth.

Sin cámara triple también se puede

El año pasado, Google demostró a toda su competencia que puede superar a cualquier cámara doble del mercado con una cámara sencilla. Este año, el fabricante vuelve a poner énfasis en la cámara y equipa el Pixel 3 con un sensor principal de 12,2 megapíxeles y apertura de f/1.8. Por supuesto, Google ha hecho unas cuantas mejoras en el software, para poder ofrecer resultados excelentes este año también.

• ¿Triple cámara, para qué? Google Pixel 3 se salta las reglas

Bueno, este año sí que hay una cámara doble, pero no está en la parte posterior sino en la delantera. La cámara para selfies consta de dos sensores de 8 megapíxeles con aperturas de f/1.8 y f/2.2. Uno de los sensores se utiliza como objetivo gran angular.

Google también ha mejorado el modo retrato y también se propone obtener mejores grabaciones en HDR con algoritmos optimizados. De todas formas, los vídeos en 4K solo se pueden grabar con un máximo de 30 fotogramas por segundo. También son posibles las tomas en Full HD con 30, 60 o hasta 120 fotogramas por segundo, así como vídeos en HD con 240  por segundo. Lamentablemente sigue faltando una función de cámara rápida.

Nueva aplicación de cámara con más funciones

Con el Pixel 3, Google también ha hecho mejoras en la app de la cámara: ahora, al deslizar el dedo en horizontal por la pantalla se puede cambiar entre los modos estándar. Y hay más modos "escondidos" en el área de Más. La navegación es más cómoda para la mano, y también más intuitiva que el menú lateral del modelo anterior.

 Casi todos los modos de la cámara de Google funcionan con inteligencia artificial, para poder mejorar la calidad de la imagen. La función más destacada es la del modo nocturno, que puede mejorar considerablemente fotos hechas en pésimas condiciones de luz.

• El modo nocturno del Google Pixel 3 ilumina la oscuridad

Un modo que no resulta tan bueno es el nuevo modo Panorama, que no solo es difícil de manejar, sino que además ofrece resultados poco satisfactorios.

Batería más grande y con carga inalámbrica

Con 2.915 mAh, la batería del Pixel 3 resulta ser más grande que la del modelo anterior. Pero también debe abastecer con energía a una pantalla más grande. Al final del día, el Pixel 3 ofrece una autonomía muy parecida a la duración promedio de la batería del Pixel 2.

Por lo general, durante el tiempo que analicé el dispositivo llegué a unas cinco horas aproximadas con la pantalla encendida, usando el móvil para reproducir música y películas, navegar por redes sociales e internet en general, es decir un uso mixto. Los días de uso más intenso, el Pixel 3 se agotaba ya a las 21:00 horas y había que conectarlo al cagador. En este caso ayuda desactivar la función Always-On-Display.

Si hacéis un uso intenso del móvil a diario, con muchas fotos, internet, mensajería y etc. os encontraréis rápidamente con las limitaciones del Pixel 3. Especialmente si, después del trabajo, queréis hacer algún plan con amigos, por ejemplo. En ese caso tendréis que cargar el teléfono en algún momento del día, lo que pone en evidencia que las adaptaciones del software no pueden equilibrar la poca capacidad de la batería.

La batería del Pixel 3 se carga con cable USB tipo C, cuya entrada está en la parte inferior, y también admite la carga rápida. Quien no pueda conectar el cable y tenga tiempo suficiente, puede cargar el dispositivo de forma inalámbrica gracias a la parte posterior de vidrio. Ya era hora, ya que Google había sido uno de los primeros fabricantes en implementar la función con sus dispositivos Nexus, pero después volvió a prescindir de ella durante varias generaciones.

Google Pixel 3 – Especificaciones técnicas