Creo que Huawei puede convertirse rápidamente en el número 1

¿Es demasiado ambicioso Huawei? Depende del punto de vista. Cuando se está seguro de poder hacer cualquier cosa, no se trata de ambición sino de confianza en uno mismo. Solo en caso de fracasar se ve si esa confianza era merecida o exagerada. En otras palabras, de aquí a unos meses saldremos de dudas y sabremos si Huawei es una empresa realmente ambiciosa o perfectamente consciente de su potencial.

Sea como sea, una serie de elementos me hacen pensar que la confianza de Huawei en sí mismo no es exagerada y que puede alcanzar sus objetivos. Huawei es el principal fabricante chino y el tercero a escala internacional, es decir, es un gigante que, en contra de la opinión de los escépticos, sabe cómo gestionar distintos mercados. Casi la mitad de sus ventas se realizan fuera de las fronteras chinas, una buena parte de ellas en Europa. O sea que la influencia del mercado chino es fuerte pero no central en la estrategia de Huawei.

Un sistema que funciona

Apple ha sido a menudo criticado pero si hay algo que no se le puede negar es el éxito de su sistema de producción. Se basa en la integración vertical: los elementos los fabrican proveedores reunidos (al menos en el cuadro del proyecto de fabricación del teléfono) bajo el estandarte del fabricante. Con este modelo ya ensayado, Samsung emplea uno similar, ya que producen ellos mismos sus procesadores Exynos, y Google opta por una estrategia parecida en sus Pixel. Huawei, también dentro de esta lógica, fabrica por ejemplo sus procesadores Krin a través de su filial HiSilicon.

¿Cuál es el interés de esta estrategia? Procurándose el material/los componentes en sus propias filiales o sus socios, las empresas evitan tener que comprarlas a terceros que podrían hacérselas pagar a precios más altos. Por supuesto, algunos fabricantes necesitan de otros para obtener determinadas tecnologías (por ejemplo apple se procura los procesadores via sus asociados) pero intentan minimizar los costes al máximo. Con esta estrategia Huawei se da cartas para maximizar sus ingresos/beneficios, lo que  aumenta, evidentemente, el potencial de inversión, que se traduce (en teoría) en productos innovadores/de calidad, así que se aseguran las ventas, etc.

El problema que tiene Huawei en Occidente es que es una marca menos conocida que apple o Samsung como fabricante de smartphone y sufre la imagen de los malos fabricantes chinos. Le está costando cambiar esto: una parte del presupuesto se dedica a hacer que se hable de ellos a gran escala. Por ejemplo, invitó a una de sus conferencias no solo a la prensa especializada en high-tech sino además a medios m´sa generalistas con el fin de asegurarse que el común de los mortales escuche hablar de ellos. Sí, el presupuesto dedicado al marketing da sus frutos.

Resultados probados

Hace unos años, los stands de Huawei en las grandes conferencias (tipo MWC) no eran particularmente grandes. Por supuesto, que ahora el presupuesto les permite tener stands más grandes que atraen la atención de más público, pero ese no es él único gancho que explica por qué la gente se siente atraída. El éxito creciente de Huawei en Europa capta cada vez más a clientes y profesionales (periodistas, especialistas en tecnología, etc)

Hace apenas un año, Huawei conoció un aumento del 63% en sus ventas de smartphones, solo en China llegaba al 81%. El pasado verano, se comunicaron las cifras de principios de año; 40% de aumento a nivel de ventas. En otros términos, la demanda en cada vez mayor as´que Huawei produce y vende más smartphones.

Mejora de la reputación de los fabricantes chinos.

En general, los fabricantes chinos no gozan de una buena reputación; mala calidad del material, software espía y muchas otras cosas. Es evidente que algunos fabricantes desconocidos o poco populares, así como algunos revendedores, pueden ser problemáticos. En conjunto, los smartphones Huawei no son peores que los demás. Lo hemos visto hace bien poco con Samsung y Apple: un problema de fabricación le puede pasar a cualquiera, incluso a los más reputados fabricantes.

Ya he abordado el tema en el siguiente artículo, así que no dudéis en echarle un vistazo si queréis saber más sobre los smartphones chinos y lo que se les reprocha.

Ahora bien, la reputación de los smartphones chinos está mejorando con el tiempo. El interés de los usuarios por los fabricantes chinos (generalmente gracias a sus precios, algo más baratos que los de sus rivales) y el interés de los fabricantes por el mercado europeo les han obligado a hacer esfuerzos. En términos de calidad, la idea de que Samsung o Apple son mejores pronto estará en vías de extinción. El número 3 se presenta como una buena alternativa a los dos primeros.

El software está en claro progreso

El software de Huawei, EMUI, ha sido a menudo criticado. Por una parte se le reprocha ser un Android “iOSizado”, o sea, un sistema basado en Android pero modificado para parecerse a iOS (tal vez por la influencia del público chino). Por otra parte, las actualizaciones tardan demasiado en ser desplegadas en los dispositivos. Evidentemente, el segundo punto tiene relación con el primero.

Dicho esto, hemos podido ver que las cosas han cambiado con el Mate 9. Yo me arriesgaría a decir que EMUI se acerca a Stock , pero al menos ahí encontramos Android puro. Como ya ha comentado mi colega Pierre “Huawei ha hecho serios progresos a nivel de software”. Los que estén acostumbrados a Android estarán menos desorientados. En cuanto a las actualización, mi colega Eric tuvo una entrevista con el vicepresidente de la marca, quien le confirmó que las actualizaciones serán más rápidas. ¿qué más se puede pedir?

Es verdad que aún queda camino por recorrer pero Huawei ya anda bien encaminado. ¿Qué pensáis vosotros? ¿Logrará el fabricante chino imponerse?