¿Por qué todos los smartphones vienen de Asia?

La ola asiática ha barrido por completo todo el mercado de smartphones y se ha tragado todo a su paso, incluso a la compañía francesa Alcatel, que ha sido incapaz de mantener su independencia. Por lo tanto, a excepción de algunos guerreros, la inmensa mayoría de los fabricantes vienen de Asia.

¿Por qué no hay smartphones hechos en Estados Unidos o en Europa? Hay muchas razones, y algunas de ellas te las explicamos a continuación.

Coste de la mano de obra

Para crear (y vender) un producto se necesita capital, dinero, money, billetes. Este dinero en la producción y en técnicas de venta/marketing tiene el fin de comercializar un teléfono en un mercado. Cuanto más grande sea el mercado, más smartphones se fabricarán y venderán en él, esto es así aquí y en Mordor. Imagínate un mercado de 1,300 millones de personas, la mayoría de los cuales son clientes potenciales. En ese mercado imaginario sería posible vender muchísimos smartphones.

Si el mercado y la fábrica se sitúan en el mismo país, los costes de producción son más bajos, pero si empezamos a meternos en el jardín de exportar nuestros productos los precios de los smartphones aumentarán a pesar de que los costes de producción seguirán siendo bajos.

China es un gran mercado de más de mil millones de personas

Posiblemente estés pensando que este es el caso de China, pero no de los demás. Hay otros (muy pocos), como LG y Samsung, que usan el mismo sistema y tienen sucursales en China. El problema para estos fabricantes es que la competencia en China es tan grande que les resulta muy difícil hacerse un hueco en un tren abarrotado de competencia. Estamos ante una lata de sardinas mercantil.

Este punto no responde por qué muchas empresas no asiáticas se podrían trasladar a China para reducir todo lo posible el coste de producción. A grandes rasgos, los costes de transporte no serían tan grandes como, por ejemplo, en Europa.

Estrategia de precios

Lo hemos visto en muchos de nuestros análisis: la tendencia de China es ofrecer teléfonos con características muy cercanas a la gama alta y ponerles un precio de gama media. ¿Por qué? ¿Porque nos quieren? ¿Quieren casarse con nosotros? No, simplemente se trata de un estrategia entre muchas para llevarse un trozo mayor del pastel que es el mercado de los smartphones, mientras Samsung y LG siguen sacando smartphones de gama alta sin excesivas innovaciones (aunque parece que las van racionando a lo largo del tiempo)

¿Funciona este método? A primera vista se podría decir que sí, pero aún es pronto para dar una respuesta definitiva. Lo que sí es seguro es que teléfonos con hardware de gama alta a precio de gama media, como el Honor 8, se han hecho populares rápidamente. Sin embargo, reducir los precios de esta forma puede ser peligroso, pues si por algún motivo (por ejemplo, problemas financieros) deben aumentar los precios, muchos clientes potenciales darán marcha atrás y recurrirán a la competencia.

Sin embargo, la gama alta pura y dura no está sujeta a la reducción de precios debido, sobre todo, a que la calidad de todos sus componentes podría hacer morder el polvo a todos aquellos que se atreven a ponerse en su camino. Por lo tanto, el Samsung Galaxy S7 Edge no tiene nada que temer del Honor 8, por ejemplo.

Ventajas locales

Nuestros amigos asiáticos son menos rigurosos que nosotros en los temas jurídicos y económicos. Es muy frecuente que en el tema de los smartphones se vulneren derechos de autor o patentes. Hay varias soluciones posibles: las empresas pueden invertir tiempo en pagar los daños y perjuicios o bien pueden buscar alternativas.

De este modo se utilizó el concepto "acuerdo de licencias cruzadas", una alternativa interesante que permite a una empresa usar las patentes de otra si se le permite. Este intercambio de buen proceder ahorra mucho tiempo y dinero a las empresas, e incluso a los tribunales. A nivel económico, aumenta la competencia entre empresas (aquellas que se pueden permitir hacerlo) y se cierra tanto el mercado a las nuevas empresas que pueden tener problemas para hacerse un sitio en el mercado actualmente.

Los precios reducidos de los teléfonos asiáticos son a menudo incrementados cuando llegan a Occidente, a Estados Unidos en particular. Por lo general, las compañías telefónicas añaden un margen sobre el precio dependiendo de la suscripción elegida. En Europa, la compra de smartphones libres sin la tarjeta SIM se está haciendo cada vez más popular, por lo que se ven menos afectados por este problema. Sin embargo, en Estados Unidos, la situación es diferente, y es también una de las razones por las que el mercado de aquel país desanima a algunos fabricantes.

Salir de la rutina

Mientras que Occidente tiende a usar métodos convencionales de comercialización, las compañías asiáticas no dudan en copiar (ya hemos visto muchos smartphones mezcla de Samsung/Apple) e innovar.

El director general de Xiaomi, por ejemplo, anunció que podría mantener un periodo de renovación relativamente largo de unos 18 meses en lugar de los 6 meses de muchos otros fabricantes. ¿Por qué? Por varias razones, pero la principal es que es muy probable que los precios de los componentes baje, lo que obviamente da una oportunidad a Xiaomi de beneficiarse.

¿El futuro de los smartphones está en Asia?

Es imposible responder a esta pregunta con un 100% de certeza, pero a primera vista podría ser así, y es que el pasado y el presente de los smartphones está allí. Sin embargo, geográficamente hablando, existe un potencial gran competidor en un país al otro lado de Asia: India.

El mercado de la India es muy amplio y, sobre todo, diferente. Según un analista local, India podría representar "la nueva China para los smartphones". El futuro nos dirá las respuestas a su debido tiempo.

En tu opinión, ¿cómo evolucionará la competencia en el terreno de los smartphones? ¿Tendrá que mantener Samsung su posición de liderazgo?