Por qué mi Xperia Z2 aún va a estar mucho tiempo conmigo

¿Por qué me decidí por este terminal?

Para empezar, me gustaría contarte por qué el Xperia Z2 y no otro smartphone. En el momento en el que decidí que quería un smartphone libre (para evitar los molestos plazos, pues prefería pagar y olvidarme de desembolar dinero mes a mes), me hice una lista mental de qué es lo que quería que tuviera mi futuro smartphone.

Una cosa que era fundamental era el tema de la autonomía, algo prioritario, y los 3.200 mAh del Xperia Z2 lo situaban en la lista. Lo siguiente era un diseño elegante, cosa con la que, al margen de la falta de innovación, Sony me proporcionaba. También buscaba altavoces frontales, pues quería que el sonido fuera hacia mí en lugar de al de enfrente y no quería que se tapara con la mano fácilmente.

Buscaba una cámara decente, no era relevante si era o no la mejor, sino que fuera capaz de resolver cualquier situación, y la buena fama de Sony (a pesar de su software) le mantenía en la lista. La fluidez era muy importante, y la ligereza de la capa de Sony era un buen aval. Con estos puntos como referencia, al final sólo había dos terminales en la lista: el HTC One M8 y el Xperia Z2. El One M8 es más elegante a todas luces, y sus altavoces mejores, pero en cuanto a autonomía tenía poco que hacer, así que me decidí por el Z2 que, además, estaba más barato.

¿Con qué me encontré?

Al abrir la caja casi me arrodillo y le pido matrimonio. Nunca había visto un Xperia de la familia Z, y a primera vista me resultó muy atractivo. Lo acuné en mis brazos y le canté una nana, mal, porque canto fatal, pero mi intención era buena. A partir de entonces, una vez pasada esa euforia de los primeros minutos, me puse a configurar el terminal y escudriñar en sus menús.

Estuve mucho tiempo machacando al terminal con juegos y apps de toda clase para comprobar que rendía como debía. Como esperaba, todo iba de maravilla en todos los ámbitos. Para probar la cámara hice fotos en todas las situaciones posibles, incluso en la semana que tuve el Galaxy S6 Edge, comparé ambos terminales en dichas situaciones. Buscaba una buena cámara y la conseguí, vale que no era la mejor, pero podía resolver cualquier situación, e incluso en algún aspecto se acercaba al S6 Edge.

Evidentemente no es un smartphone perfecto (ninguno lo es), por lo que tiene defectos como el hecho de que su trasera es resbaladiza y plana, o lo molestas que son la tapita que cubre el microUSB, o los marcos tan grandes. Pero la verdad es que me he acostumbrado y estos defectos no me resultan tan malos como para obviar sus virtudes.

¿Qué es lo que me tiene contento como para no querer cambiar de smartphone?

Como fan de Android que soy, trato de estar tan al día como me es posible y, por supuesto, he estado atento a todos los terminales que han estado saliendo al mercado. Algunos consiguen meterme el gusanillo de querer comprármelo por alguna característica especial, pero fuera de eso, si me pongo a pensarlo, me planteo si esa característica tan molona compensará lo suficiente como para cambiarlo por mi Z2. ¿Qué es lo que hace que quiera seguir con mi Z2? Aquí te nombro algunas de las cosas.

Batería

Lo he dicho unas cien veces, pero lo diré una más: la autonomía es, para mi, lo más importante de un smartphone. Viendo la gama alta del año pasado y que este año no parece que vaya a mejorar mucho, los 3.200 mAh del Z2 me tienen muy contento. Estoy ahora con la beta de Marshmallow y la batería me dura dos días enteros. Con Lollipop me duraba dos días con uso normal y 3 si lo usaba poco. Cuando llegue Marshmallow estable, probablemente esto mejore.

Sonido

El hecho de que traiga altavoces frontales es una ventaja adicional a su sonido XLoud y Clear Audio+. Sin duda el sonido es algo que disfruto bastante cuando es de calidad. Claro, el del One M8 es mejor, pero esta mejora, aunque notable, no era suficiente para que estuviera hablando de él en este artículo. El sonido que sale de los altavoces, aunque no sea el más alto, es de buena calidad.

Soporte

El Xperia Z2 salió de fábrica con 4.4 KitKat y gracias a que llegué a tiempo para apuntarme al programa de betas para Marshmallow, ahora tengo Android 6.0.1 en mi smartphone. No es estable, lo sé, pero no me afecta para el uso diario y apenas tiene bugs. Soy consciente de que no veré Android N oficial en mi terminal, pero creo que Sony ha cumplido al dar soporte durante dos años a su gama alta de inicios del 2014.

Rendimiento

Qué decir sobre esto. Xperia UI es la capa más ligera de Android (teniendo en cuenta que Android puro no es una capa), no aporta demasiadas cosas, pero a cambio tengo una fluidez enorme. No sufro lag de ningún tipo, ni siquiera ahora, con un Marshmallow en beta, ni en juegos, ni aplicaciones, ni en las pantallas principales. Su hardware, que incluso se ha llegado a usar durante el 2015 (como el ZUK Z1, mismo procesador y misma RAM).

Cámara

No es la mejor cámara de Android, pero es capaz de resolver cualquier situación, y ahora en Marshmallow, además de ganar un poco en calidad, es más ágil y tarda menos en procesar las fotos, lo que te permite hacer fotos con cierta rapidez. En plena noche, gracias a la sensibidad ISO que puede alcanzar, podrías hacer una foto a casi cualquier cosa con muy poca luz y percibir los detalles mejor que con tus propios ojos.

Conclusión

No se trata del smartphone perfecto si hablamos de verdad absoluta, pero sí lo es para mi si hablamos de lo que estaba buscando. No es el mejor en nada, pero sí es bueno en todo lo que le pido que haga. También es verdad que he tenido la suerte de que no me saliera defectuoso de fábrica, y si tú lo has tenido y te ha dado problemas, es posiblemente porque te salió uno malo.

Con este artículo quiero dar a entender que a veces no siempre debes buscar entre lo más nuevo para encontrar lo que quieres. Es posible que tú tengas el smartphone perfecto para tus necesidades, no importa qué gama sea, ni qué fabricante, sólo importa que cumpla bien con todo aquello que le pidas a tu smartphone. Hay cosas que el Z2 no tiene, como infrarrojos, un flash LED de doble tono o sensor de huellas, pero es que aún no me resulta imprescindible nada de eso.

¿Cuál es tu smartphone perfecto? ¿Lo tienes ahora mismo en tu posesión?