Mis escarceos con el iPhone SE: experiencia de un fiel usuario Android

La pregunta principal que pasa por mi cabeza una y otra vez es "¿por qué es el iPhone tan popular?" Teniendo en cuenta la expectación con la que suelen contar estos productos comparados a la mayoría de dispositivos de Android es fácil preguntarse si verdaderamente son mejores los teléfonos de Apple o si simplemente los empleados de Apple saben más de marketing. Estos son el tipo de pensamientos que siempre han pasado por mi cabeza pero en los que rara vez he tenido la ocasión de profundizar. Por primera vez, esto ha cambiado.

Esta ha sido la primera ocasión en mi vida en la que me he creado un Apple ID. El nombre parece importante, pero no es más que una combinación de email y contraseña, como ocurre con cualquier otro servicio. Y, por supuesto, simplemente he utilizado mi cuenta de correo de Gmail. Al configurar el dispositivo también he activado Touch ID, así que he puesto mi pulgar sobre el lector de huellas en todos los ángulos posibles hasta que el teléfono ha quedado satisfecho.

Acto seguido he ido a App Store. Al intentar descargar la primera aplicación se me ha pedido mi huella dactilar. Lo mismo ha ocurrido con la segunda. Quería hacerlo las veces que fuera necesario para que App Store dejara de pedírmela finalmente, hasta que he descubierto que esto no era posible. Uno de mis compañeros de trabajo con iPhone me lo ha explicado como hacerlo: Apple no permite descargar aplicaciones sin pasar por la autenticación de seguridad. Por dios, qué engorro.

Configuración de aplicaciones en iOS: un comienzo turbulento

La primera aplicación que he descargado ha sido Inbox for Gmail, a la que estoy acostumbrado en mi Nexus 6P. Inbox ordena el correo automáticamente, pero puesto que no es posible exportar sus filtros e importarlos a la aplicación de correo de iOS, he preferido quedarme con la propuesta de Google. Fácil. iOS ha entendido mi decisión y automáticamente me ha mostrado las notificaciones de Inbox en lugar de la de la app de de correo de Apple. Si hicieras esto en Android tendrías que desactivar las notificaciones de la otra aplicación manualmente.

Tras configurar mis dos cuentas de Gmail en Inbox he podido utilizar mis datos de acceso en otras aplicaciones de Google, como Fotos o Play Music, y entrar rápidamente. Gracias a dios, porque de otra manera habría tenido que introducir mis datos manualmente siguiendo la autenticación ad dos pasos.

En otra aplicaciones, como Feedly o Netflix, no he tenido la misma suerte. En Android simplemente tienes que pulsar el botón de registro de Google y ya estás dentro. En iOS es otra historia. Para entrar a la mayoría de aplicaciones he tenido que rellenar los campos de email y contraseña de manera manual.

Feedly ha sido la peor en este aspecto. En Feedly, así como en AirBnB (ver captura de pantalla debajo), se ha abierto una pantalla dentro del navegador para introducir los datos de Google. Sin embargo, tras introducir mi correo electrónico, contraseña y código 2FA, he sido redirigido a la página de inicio de Google en lugar de volver a Feedly, así que he tenido que crear un nuevo usuario de Feedly para evitar este problema.

Una vez he sido capaz de sobrepasar estas dificultades iniciales he quedado sorprendido por la calidad de las aplicaciones. Es ahí donde puedes ver y sentir la madurez de este sistema y los beneficios de las políticas de claridad que se aplican en todas las aplicaciones de App Store. Puede que un usuario de Android comience echando de menos los botones de Inicio y Atrás, pero un usuario de iOS entiende que estos gestos están integrados dentro del propio sistema de manera intuitiva. En mi tercer día, utilizaba los gestos de iOS sin problemas.

Las aplicaciones demuestran la calidad de iOS

iOS tiene una ventaja evolucionaríaa sobre Android principalmente porque ha tenido más tiempo para desarrollarlo. Cupertino lanzó su sistema operativo en enero de 2007 y, en julio de 2008, esto condujo a la App Store. Android vio la llegada de su Play Store en septiembre de 2008. Al ser el último en llegar, Google tuvo que bajar el umbral para los desarrolladores, obstaculizando que se incluyeran unas reglas tan estrictas como las de Apple. Esto terminó desencadenando en miles y miles de aplicaciones de baja calidad que se asentaron en la tienda de Android y que todavía viven ahí. Apple, por su parte, se permite el lujo de prohibir el acceso a algunas aplicaciones que no cumplen los criterios.

La experiencia de smartphone, en términos de aplicaciones, es a veces mucho mejor en iOS. Aunque los teléfonos de Android no son los verdaderos culpables, por lo que acabo de explicar. Samsung, Sony, HTC y otros fabricantes están construyendo teléfonos que me gustan mucho más que los iPhones, tanto a mí como a muchos otros usuarios, como la dramática bajada de ventas de Apple muestra.

En los días que está por venir continuaré explorando iOS, sus virtudes y sus debilidades. Tengo entendido que el sistema de restauración es fantástico y muy beneficioso para el usuario, así que probablemente seguiré con eso.

¿Os interesan las experiencias de un usuario Android utilizando iOS y el iPhone SE por primera vez? Cuéntanos en los comentarios si quieres oír más sobre esta historia.