Así es como la realidad virtual podría evolucionar

Hemos visto recientemente que la RV choca todavía con ciertas dificultades para conseguir una aceptación total: su tecnología provoca mareos y dolores de cabeza a algunas personas, es poco atractiva porque el catálogo de aplicaciones es algo escuálido, pero el problema principal es, obviamente, un precio nada asequible. Hará falta algo más de tiempo para que la RV sea accesible para todo el mundo, pero  esto no tiene por qué ser necesariamente malo, ya que cuando llegue ese día la tecnología será mucho mejor que ahora.

La RV y el olfato

Algunos buscan soluciones a estos problemas, otros quieren ir más allá. Una compañía japonesa tiene la ambición de hacer que la realidad virtual sea aún más real al añadir un sentido más a los dos ya existentes (oído y vista): el olfato. Por lo tanto, desarrollan la VAQSO VR, un pequeño dispositivo que contiene cartuchos, cada uno con un olor muy específico. Según sean nuestras aventuras en la realidad virtual, se liberarían ciertos olores que permitirán sumergirse plenamente en el mundo del juego. Esta tecnología obviamente necesita mejoras pero tiene potencial.

Como señala CNET, el olor ya está asociado con la RV, pero en situaciones más específicas. Ya encontramos esta idea en el OhRoma de CamSoda, y desde una perspectiva mucho menos atractiva tenemos también el Nosulus Rift de Ubisoft. Con suerte podremos llegar a algo más interesante que el sexo y las mascotas (por favor, absteneos si os entran ganas de escribir en los comentarios algo como "habría que probar las dos cosas a la vez”).

¿Qué pasa con los otros sentidos?

La vista y el oído son las bases de la experiencia del videojuego, y el olfato pronto se les unirá, de modo que sólo nos queda implementar el tacto y el gusto para hacer de la RV una experiencia completa. En teoría, el tacto sería sencillo de diseñar ya ya hay que tocar un mando para interactuar (que puede servir como varita mágica, espada, etc.). Así que, si queremos un juego FPS en el que disparar un arma, no haría falta más que un mando, pero el número de accesorios y tipos de mandos no dejaría de aumentar a medida que pase el tiempo.

El sabor se complica mucho más porque es una interacción directa dentro del cuerpo (es decir, hay que llevarse algo a la boca). A menos que utilicemos un accesorio externo optimizado para esto (lo cual parece poco práctico), no puedo imaginar otra solución. Dicho esto, tampoco puedo imaginarme cuál sería la utilidad del gusto en los juegos o las visitas guiadas. Tal vez podría ser interesante para las empresas de pastelería o compañías de restauración en general, para hacer descubrir sus productos. Pero esto no es más que pura especulación, por supuesto...

¿Cómo veis vosotros el futuro de la realidad virtual?